lunes, 22 de septiembre de 2008

Seis trabajadores de FRS, detenidos al amotinarse en un ferry de Tarifa

Solidaridad con los trabajadores marroquíes, despedidos y detenidos por protestar por las condiciones de trabajo.
La Guardia Civil obliga a desalojar a los tripulantes del buque del que se negaban a bajar como medida de protesta tras ser despedidos por la naviera, que justificaba la medida por desobediencia al capitán del barco
Fuente: Indymedia Estrecho

Seis trabajadores de la empresa FRS fueron ayer obligados por la Guardia Civil a abandonar el buque de pasajeros del Tanger Jet II en el que permanecían y al que impidieron su salida desde Tarifa hasta Tánger durante más de cinco hora como medida de protesta laboral.
Los tripulantes eran de origen marroquí y se identificaban como "trabajadores de la empresa que estamos en huelga", según uno de ellos, por las malas condiciones laborales y por la expulsión de cuatro de sus compañeros. Explicó uno de los amotinados minutos antes de ser forzado a bajar del barco por los agentes, que habían "echado a cuatro trabajadores por estar sindicados" y que estaba previsto que se hiciera lo mismo con ellos. Además se quejaban de que "trabajamos doce horas a diario y no tenemos ni mutua".
El incidente se inició sobre las 13:00 horas cuando estaba prevista la salida del buque de pasajeros. Según fuentes de la empresa, seis marineros incumplieron en una falta grave al no obedecer las instrucciones del capitán del barco. Desde ese momento FRS decidió despedir a los seis trabajadores de forma inmediata y se les pidió que abandonaran el buque, a lo que estos se negaron. Incluso uno de ellos aseguró a Europa Sur que no bajarían por su propio pie y que tendrían que ser forzados.
Entonces se decidió el desalojo de los pasajeros del Tánger Jet II, los cuales fueron llevados a otro de los ferrys de la compañía naviera para proceder con el viaje previsto hasta el puerto de Tánger.
La empresa, ante la negativa de los seis trabajadores recién despedidos, decidió sobre las 16:00 horas requerir de los servicios de la Guardia Civil que, acompañado por la Policía Portuaria, se personó en el muelle tarifeño.
Una decena de agentes de la Benemérita decidieron subir al ferry y durante horas intentaron convencerles desde el interior del propio barco para que bajaran a tierra. Uno de los convocantes de la huelga afirmó que "nos están presionando para que salgamos pero nosotros no vamos a bajarnos, no tenemos intención de abandonar", afirmó minutos antes de ser detenido, mientras negociaban con los agentes. Al no ceder la Guardia Civil decidió forzarles a desalojar el barco. Para ello, introdujo un vehículo Patrol en el interior de la bodega con refuerzo policial y, posteriormente, se procedió a la detención de los convocantes de la huelga. A las 18:35 horas ya no quedaba ninguno de ellos a bordo.
El presidente de FRS, Luis Mora, lamentó los hechos y, sobre las acusaciones dijo que "será un juez quien decida". Afirmó que "ellos pueden reivindicar pero no parar una actividad". Además, dijo desconocer que hubiera sucedido algo similar ayer en Tánger tal y como afirmaban los trabajadores.

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